Un ruso se come un aguacate
Galería Diego Rivera
San Francisco, 2017
Mural; tinta china, lápiz, clavos y hilo
tres libros de acordeón,
un mango,
un aguacate,
una botella de ron
y tres poemas
Las Esquinas de un Aguacate
Caminé numerosas esquinas de un aguacate
Buscando aquella semilla eterna del Guaguancó
Porque muchos repiten y repiten
Que Dios vive afuera,
Pero rara vez recuerdan
Que vive adentro también
Crucé esquinas soleadas,
Corrí esquinas amuralladas,
Esquinas brasileras
Y también cubanas
Al llegar a la Plaza
Vi a unos menores
Usando la semilla de pelota
¡Al meter gol se partió
Y salió el Guaguancó!
Los Rusos no Bailan Salsa
¡El Bugalú!
Para dominar ritmos sincopados
Se precisan las dos patas
¡El Bugalú!
Los Rusos con dos patas surdas
Se resbalan al ritmo del compás
¡El Bugalú!
Los Norteamericanos con dos patas derechas
No pueden llevar el ritmo de esta mecha
¡El Bugalú!
Para dominar ritmos sincopados
Se precisan las dos patas
Una izquierda y otra derecha